El 29 de julio del 2020 ocurrió uno de los más grandes Incendios en el CHL durante el período de pandemia. Alrededor de 50 familias resultaron damnificadas, familias que actualmente se encuentran en alojamientos temporales, sobreviviendo y sin la fortuna de encontrar trabajo. La respuesta de PROLIMA ante este siniestro fue pintar las fachadas de los inmuebles afectados, no mejorarlos para las familias ¿Pintar las fachadas aludiendo a la vida de la colonia solucionará la problemática de fondo? No.Además, con estas acciones se trata de invisibilizar los problemas de fondo no atendidos por las autoridades competentes. Así como la falta de manejo técnico y social ante la problemática de la vivienda en el CHL. No es la primera vez que PROLIMA actúa de esa manera, por el contrario, es su política de intervención en el Centro Histórico de Lima. Desde el 2019, la entidad gubernamental ha invertido en el pintado de las fachadas de inmuebles que se encuentran en malas condiciones. Esta política inmediatista evidencia el sesgo de la institución por pensar el CHL como un museo y centro de inversión, por eso sus acciones están direccionadas solo a mejorar la imagen urbana, y no responde a los reclamos de los y las vecinas.¿Qué tipo de intervenciones merecen los ciudadanos de Barrios Altos y Monserrate? Las que se hayan desarrollado mediante un proceso integral y consensuado, es decir: espacio urbano + vivienda + personas. Es necesario pensar más allá de respuestas inmediatistas y de moda como el urbanismo táctico, no solo como un espacio para las inmobiliarias y los empresarios, se necesita repensar el Centro Histórico de Lima para una vida urbana y vivienda digna, con la participación constante de todas las familias residentes.
Leave a Reply